Desarrollar una práctica de enseñanza de calidad requiere, por parte del profesor universitario, de una serie de conocimientos, habilidades y actitudes que le permitan desarrollar un ejercicio profesional encaminado al desarrollo de aprendizajes, comprensiones y competencias en sus estudiantes.  Son ya varios los listados que describen las competencias profesionales que un profesor debe desarrollar para el ejercicio profesional de la práctica (Proyecto Tunning, 2004; Perrenoud, 2004; Cano, 2005 entre otros). Los autores coinciden en la necesidad de desarrollar competencias para la reflexión y la investigación sobre la práctica de enseñanza. En este marco, la investigación pedagógica se concibe como parte de la integral del desarrollo profesional de la acción de docencia.

En este sentido, la investigación pedagógica adelantada por los profesores, se convierte en vehículo de mejora profesional, en tanto permite reflexionar sobre las prácticas cotidianas, problematizar una situación y poner en marcha una propuesta de solución.  Este ejercicio de reflexión permanente sobre su acción de enseñanza llevará necesariamente a una mejora en la misma.

De otra parte, se convierte en herramienta para la construcción de conocimiento teórico y práctico sobre la enseñanza y el aprendizaje específico de los saberes y las disciplinas. Ya que, al buscar explicaciones a los cambios en las prácticas, derivados de la reflexión sistemática y rigurosa de su propio quehacer, el profesor generará conocimiento nuevo sobre las formas, factores asociados y comprensiones que se requieren para el desarrollo de una práctica docente de calidad.

Desarrollar una práctica de enseñanza de calidad requiere, por parte del profesor universitario, de una serie de conocimientos, habilidades y actitudes que le permitan desarrollar un ejercicio profesional encaminado al desarrollo de aprendizajes, comprensiones y competencias en sus estudiantes.  Son ya varios los listados que describen las competencias profesionales que un profesor debe desarrollar para el ejercicio profesional de la práctica (Proyecto Tunning, 2004; Perrenoud, 2004; Cano, 2005 entre otros). Los autores coinciden en la necesidad de desarrollar competencias para la reflexión y la investigación sobre la práctica de enseñanza. En este marco, la investigación pedagógica se concibe como parte de la integral del desarrollo profesional de la acción de docencia.

En este sentido, la investigación pedagógica adelantada por los profesores, se convierte en vehículo de mejora profesional, en tanto permite reflexionar sobre las prácticas cotidianas, problematizar una situación y poner en marcha una propuesta de solución.  Este ejercicio de reflexión permanente sobre su acción de enseñanza llevará necesariamente a una mejora en la misma.

De otra parte, se convierte en herramienta para la construcción de conocimiento teórico y práctico sobre la enseñanza y el aprendizaje específico de los saberes y las disciplinas. Ya que, al buscar explicaciones a los cambios en las prácticas, derivados de la reflexión sistemática y rigurosa de su propio quehacer, el profesor generará conocimiento nuevo sobre las formas, factores asociados y comprensiones que se requieren para el desarrollo de una práctica docente de calidad.